[MÚSICA] [MÚSICA] [MÚSICA] Si recuerdas acabé el vídeo anterior haciéndote una pregunta, ¿si fueras accionista de esta empresa tendrías suficiente con esta información? ¿De qué dos cuentas querrías tener más detalle, más información? Imagino que habrás acertado. Efectivamente las dos cuentas principales o las dos cuentas de las cuales querríamos saber más son los beneficios retenidos, de hecho el resultado del año y por supuesto la caja. El resultado del año que en este caso hemos traspasado a la cuenta de beneficios retenidos, nos da idea de lo rentables que han sido las operaciones de la empresa a lo largo del año. Por otro lado la caja nos dice lo que ha ocurrido con el efectivo de esta empresa a lo largo año, es decir, cómo esta empresa genera, cómo esta empresa consume caja. En este vídeo vamos a ver con detalle la cuenta de resultados, es decir, la información acerca de la rentabilidad del negocio y la semana que viene introduciremos un nuevo estado para ver exactamente qué ocurre con la tesorería de la empresa. Vamos pues con la cuenta de resultados. Si recordáis el resultado del año acabo siendo 8.400 euros. Que en el último momento, la última transacción que registramos, consistió en traspasar ese resultado a la cuenta de beneficios retenidos. Pero quedémonos de momento con ese resultado, con los 8.400 euros. Si recordáis ese resultado provenía de un conjunto de transacciones, que son las que aparecen en la derecha de esta diapositiva. Las transacciones que allí figuran, son todas aquellas que de alguna forma u otra tuvieron un impacto directo en el resultado de la empresa, es decir, en la cuenta de resultados. Lo que vamos a hacer ahora para elaborar este estado financiero, la cuenta de resultados también llamada cuenta de pérdidas y ganancias, va a ser traspasar estos saldos, estos números de una forma sistemática al lado izquierdo y con esto tendremos definitivamente la cuenta de resultados. Lo primero que debemos traspasar son obviamente las ventas, es decir, los ingresos que la compañía ha generado como consecuencia de sus operaciones, como consecuencia de vender. En este caso no importa si las ventas son en efectivo o a crédito, es decir, no importa si las hemos cobrado o no, debemos tenerlas en cuenta en su totalidad en la cuenta de resultados. Por tanto, tendremos unas ventas totales de 180.000 euros. El segundo paso, será tener en cuenta, será incorporar a esta cuenta de resultados el coste de las mercancías vendidas, es decir, el coste de los libros que salieron de nuestro inventario. Si recordáis tuvimos dos ventas, en una de ellas salieron libros por valor de 80.000 euros y en otra salieron ventas por valor de 45.000 euros, salieron libros por valor de 45.000 euros. Por lo tanto, tenemos un total de coste de mercancías vendidas de 125.000 euros. A la diferencia entre las ventas y el coste de las ventas o coste de la mercancía vendida habitualmente le llamamos margen bruto. Dejadme hacer un pequeño paréntesis aquí. En este caso estamos hablando de una empresa comercial, es decir, una empresa que se dedica a comprar libros a un proveedor y a venderlos al cliente final. En este caso por lo tanto, el coste de las ventas es exclusivamente el coste de adquisición de estos libros, nada más. Esto se complica en el caso de que la empresa no sea comercial, sino que sea industrial, es decir, que fabrique algún tipo de producto. En ese caso, el coste de la mercancía vendida, el coste de las ventas tiene que incluir no sólo la materia prima con la cual se ha fabricado su producto sino también la mano de obra y cualquier otro coste que haya influido, que haya tenido lugar en la fabricación de ese producto. De hecho, habitualmente se dice que el coste de la mercancía vendida, es decir, todos aquellos costes que de alguna forma están relacionados directamente con el producto se le llama costes del producto. Mientras que todo el conjunto de gastos que veremos en un momento que aparecen justo debajo del margen bruto, son gastos que no tienen necesariamente nada que ver o directamente nada que ver con el producto y les llamamos gastos del período. Lo siguiente que vamos a registrar después del margen bruto será todo el conjunto de gastos administrativos, generales y de ventas. Eran 30.000 euros, podemos incluir aquí además los 6.000 euros del alquiler y agruparlo todo si me permitís bajo el nombre de gastos generales. Después de los gastos generales podemos incluir aquí los gastos debido a los amortizaciones. Por un lado en mobiliario y equipo y por otro del software, 5.000 y 1.000 en total 6.000 euros que añadimos aquí. Una vez hemos introducido estos gastos más generales, estos gastos si queréis del período podemos calcular un nuevo resultado, restándolos del margen bruto que será el resultado de explotación, en este caso 13.000 euros. Fijaos que de alguna forma el resultado de explotación nos da idea de la rentabilidad del negocio antes de pagar los intereses, es decir, el coste de la financiación y los impuestos. De ahí que muchas veces a este resultado también se le llame beneficio antes de intereses e impuestos. En algunos casos además del beneficio antes de intereses e impuestos de este resultado de explotación, se suele utilizar un concepto adicional intermedio, que es lo que se conoce en las siglas de inglés como EBITDA. El EBITDA por tanto, es una medida económica si queréis, es un nuevo cálculo que nos dice cuál es el resultado antes de intereses e impuestos y también de amortizaciones. Una vez hemos registrado los gastos generales y de amortización, lo siguiente que nos queda es registrar los intereses. Por lo tanto, los incluimos en la cuenta de resultados 1.000 euros y con ello obtenemos un nuevo resultado, en este caso un beneficio que será el beneficio antes de impuestos. Finalmente you lo último que nos queda, es añadir el gasto debido a los impuestos los 3.600 euros, que nos dará ahora sí el resultado neto, el resultado total de este primer año de operaciones, es decir, los 8.400 euros que you habíamos calculado. Pues muy bien, aquí tenemos un resumen detallado de lo que ha ocurrido con las operaciones en este primer año de la librería del campus. Se suele decir por ello, que a diferencia del balance que era una foto o un cuadro en un momento determinado la cuenta de resultados o cuenta de pérdidas y ganancias es una película. Una película que explica todo lo que ha pasado con las operaciones a lo largo del año. Nos indica de alguna forma la rentabilidad de la empresa, es decir, cómo ha generado valor la empresa con sus operaciones a lo largo de este primer año. En este momento os pregunto, ¿pensáis que estos 8,400 euros es un resultado adecuado? ¿Es un resultado alto o es un resultado bajo? Una forma de responder a esta pregunta podría ser calculando lo que se conoce como la rentabilidad sobre ventas. Es decir, dividiendo el resultado final, el resultado neto entre las ventas, según esto obtenemos una rentabilidad de prácticamente el 5%. Esta rentabilidad, este número que acabamos de obtener podríamos compararlo por ejemplo, con empresas de la competencia, con empresas que hacen aproximadamente lo mismo con nosotros, con otras librerías o bien compararlo con nuestra propia rentabilidad, con nuestra propia cuenta de resultados en años anteriores. En este caso, no podemos concluir nada puesto que este es nuestro primer año de operaciones y puesto que no tenemos en este momento información sobre otros negocios similares. Otro ratio que podíamos calcular y que habitualmente calculan muchas empresas, es lo que se denomina la rentabilidad financiera. Es decir, dividir el resultado de este año entre el patrimonio neto. Recordad que los accionistas habían invertido dinero en esta empresa el año pasado, Cristina y en este caso su tío y obviamente esperaban, esperan obtener una rentabilidad sobre este negocio. Pues muy bien, la rentabilidad que estos accionistas están obteniendo la podemos calcular de esta forma, es decir, la rentabilidad que han obtenido después de un primer año de operaciones es próxima al 17%. Deberíamos preguntar a Cristina y a su tío si esta rentabilidad es aceptable o está de acuerdo a las expectativas que ellos tenían, seguramente comparado con otras posibles alternativas de inversión. En cualquier caso, no te preocupes mucho por el cálculo de estos ratios que verás con muchísimo más detalle en el curso de finanzas operativas. [MÚSICA] [MÚSICA]