Hola. Soy Claudia Bustamante, profesora en la Escuela de Enfermería de la Pontificia Universidad Católica, aquí en Santiago de Chile. En este módulo se presentarán elementos para identificar cómo debería ser un modelo de atención a personas con enfermedades no transmisibles. Para ello, revisaremos la organización actual de la atención de salud y la organización de la atención de acuerdo a un modelo de cuidados crónico. Contamos en este módulo con el aporte de la doctora Luz María Durango, médico y magíster en Administración de Salud. La doctora Durango dirige, además, la unidad de estudios del proyecto del Servicio de Salud Metropolitano Sur Oriente, en Santiago de Chile, y nos comentará acerca de las características actuales de la provisión de servicios. ¿Y cuáles son las características de nuestro modelo de atención actual? Su foco en curar más que en cuidar. Está centrado en la enfermedad más que en el paciente y la familia. Se aplica un enfoque biomédico, en lugar de un enfoque biopsicosocial. La atención es fragmentada y episódica, en lugar de establecer cuidados continuos, integrales e integrados. Uno de los problemas actuales de la provisión de servicios es el "Sindrome del Radar", el que será explicado por la doctora Luz María Durango. El "Sindrome del Radar" describe un modelo de atención que, habitualmente, los servicios de salud prestan a los pacientes agudos o crónicos. El Sindrome de Radar, es decir, se capta al paciente que concurre personalmente a consultar y se le presta un servicio que generalmente resuelve, en mayor o en menor grado, su problema de salud. La mayoría de estos requerimientos se relacionan con salud materno infantil y patologías agudas. Las personas con patologías crónicas son atendidas de forma episódica, quedando habitualmente fuera del radar de los sistemas de salud, de manera que una vez que la persona se va de la consulta o es dada de alta, desaparece y no recibe ningún tipo de atención de forma proactiva ni preventiva. Tampoco se plantea ningún tipo de monitorización remota, ni apoyo para la gestión de su enfermedad. Suele reaparecer en el radar ante la presencia de algún problema agudo o por alguna complicación de su enfermedad crónica. En síntesis, el Sindrome del Radar es cuando el paciente aparece, se le otorga una atención en donde se le da un tratamiento, se da el alta y desaparece del radar. El modelo de atención actual de los pacientes con patologías crónicas está diseñado u organizado para tener una atención episódica, no continua de las personas. Por ejemplo, un paciente diabético es categorizado de acuerdo al riesgo de presentar infarto, sea este de riesgo alto, medio o bajo. No se le categoriza o se le clasifica de acuerdo al conjunto de enfermedades que él pueda tener o a la polifarmacia que actualmente reciben los diabéticos, ni siquiera se tiene en cuenta si tiene condiciones psicosociales que favorezcan o empeoren su condición crónica. Es por esto, que la atención o el modelo no está preparado para apoyar la gestión de su enfermedad. Es fragmentado, no ayuda ni a prevenir, ni a tratar, ni a rehabilitar las patologías crónicas. La atención de estos pacientes debe ofrecer una categorización de acuerdo a lo que el paciente necesita para favorecer su autoempoderamiento y su autoconocimiento de la enfermedad. Los antecedentes, previamente revisados, permiten establecer que existe discordancia entre las necesidades de las personas con enfermedades no transmisibles y el modelo de atención actual. Se trata de un modelo episódico y fragmentado de prestación de servicios de salud que debe ser cambiado por un modelo de cuidados oportunos, continuos, integrales e integrados, basados en la mejor evidencia científica disponible.